Un domingo cualquiera

En la película “Un Domingo Cualquiera”, Al Pacino arenga a los jugadores de su equipo de fútbol, con un discurso motivacional que consigue revertir el sentimiento de derrota instalado en sus mentes y les catapulta hacia la victoria, insuflándoles el espíritu de lucha en equipo. Aquí está el vídeo y un fragmento del discurso.

https://www.youtube.com/watch?v=mDT0PV8jhlQ

“No sé que decir en realidad. Tres minutos para la mayor batalla de nuestras vidas profesionales. Todo se reduce a hoy, o nos curamos como equipo, o nos desmoronamos.
Jugada a jugada, pulgada a pulgada hasta el final. Ahora estamos en el infierno caballeros, creerme, y, o nos quedamos aquí dejándonos machacar o luchamos por volver a la luz. Podemos salir del infierno, pulgada a pulgada...
...En este equipo nos dejamos nosotros y cada uno de los demás por esa pulgada que se gana, porque cuando sumamos una tras otra, porque sabemos que si sumamos esas pulgadas, eso es lo que va a marcar la puta diferencia entre GANAR O PERDER, ENTRE VIVIR O MORIR. Os diré una cosa, en cada lucha, aquel que va a muerte, es el que gana ese terreno y se que si queda vida en mi, es porque aun quiero luchar, y morir por esa pulgada. Porque vivir, consiste en eso. Las seis pulgadas frente a vuestras caras. Yo no puedo convenceros de que lo hagáis, tenéis que mirar al que tenéis a vuestro lado, MIRADLE A LOS OJOS!, vais a ver a un tío dispuesto a ganarla con vosotros, vais a ver a un tío que se sacrificara por este equipo, porque sabe que cuando llegue la ocasión vosotros HARÉIS LO MISMO POR ÉL.
Eso es un equipo caballeros y… o nos curamos.. AHORA como equipo o moriremos como individuos.

Ahora… ¿Qué vais a hacer?”

Son reflexiones que deberían valer para entender lo que nos jugamos como sociedad, hacia donde queremos ir; si escoger el individualismo como apuesta para superar la situación de emergencia o crisis en la que nos encontramos, o, por el contrario, elegir el camino de la solidaridad, de ir todos a una sin dejarnos personas por el camino, intentando, cada uno de nosotros, en la medida de lo posible, aportar lo mejor de sí, para que el cambio no se quede en una mera declaración de intenciones, remar todos juntos para gestionar nuestra individualidad y no nuestro individualismo.

Empoderémonos para realmente cambiar las cosas, todos y todas somos necesarias, no va a haber otra oportunidad como esta en generaciones de conseguir cambiar el status quo vigente, de revertir a la sociedad el poder político real, apostando, desde la radicalidad democrática, por un modelo de organización social que sea ejemplo y espejo para cualquier pueblo del mundo.

No podemos continuar con una cascada de casos de corrupción como los que nos asolan, hemos de poner freno a la desvergüenza, a la humillación a la que nos somete un nutrido grupo de políticos, empresarios y manipuladores de la realidad, que han decidido por nosotros que no somos ciudadanos, sino súbditos; hemos de rebelarnos contra la resignación del “qué pasará mañana”, de una trama tapando a la siguiente, del “no hay nada que hacer”. Si, hay mucho que hacer, todo realmente está por hacer y sólo la ciudadanía puede conseguirlo. Para comenzar echémosles. Pongámonos manos a la obra, no queda otra.

Juan M. Segarra. Iniciativa del Poble Valencià. Coalició Compromís.